EL VIDEO DEL MOMENTO EN EL QUE CAE LA GRÚA SOBRE LA CASA DE LA PILETA.

Según el dueño, el operador de la grua se pajerizó mirando a su mujer y a la hija que andaban prácticamente en pelotas mirando las maniobras de izaje. Pero para la empresa de grua, la culpa es del tipo que "por dominado" accedió a colocar esa garcha en la casa: 
-"La mujer quiso ponerla llena para aprovechar a bañarse en presencia de los obreros."- 

      La satisfacción de ver una tragedia causada por un accidente en donde presumiblemente la pelotudez jugó un papel preponderante, es una de las satisfacciones más grande que cualquier hijo de puta puede tener. Es caso del tipo que derrumbó la casa poniendo una pileta con la grúa, donde el placer de ver a un tipo que tiene guita sufrir el embate de la desgracia ha llenado de gozo a gran parte del pueblo argentino: -"Todo es culpa de la conchuda de mi jermu y mi hija que se pusieron a romper las pelotas que queria una pileta para enjuagarse la cajeta con las amigas. Les dije que la hacíamos de material, pero insistieron en que no había tiempo y que la querían ya. Mira que quilombo tengo ahora.- dijo el hombre, re caliente con su familia que lo llevaron a hacer esta cagada. -"Todo fué una fatalidad en donde la culpa también la tuvieron ellas. Cuando vinieron los pajeros de la grúa andaban prácticamente en pelotas paseándose por donde estaban los tipos, mostrando el orto, las tetas, la argolla, todo.- señaló el hombre.

Las reparaciones en la casa también estan saliendo como el orto: el pelotudo
llamó a la misma empresa de gruas.

Desde la empresa de grúas dijeron que los cálculos los habían hecho bien, pero todo se fué a la mierda cuando la mujer pidió que pongan la pileta llena para ahorrar tiempo: -"Coincido con el forro del dueño en que la culpa la tuvo la mujer. Le dijimos que con la pileta llena se iba a ir todo a la mierda, pero insistió diciendo que ella era la que pagaba y blabla. Además, no nos íbamos a perder la satisfacción de ver semejante quilombo."- señaló el operador de la grúa.

Miles de curiosos se acercaron a sacarse fotos. La mujer, los recibía en pelotas en la puerta: -"Todavía caliento".- sostuvo la hembra.